Con una dotación total de 3,5 millones de euros, el Plan Integral de Transición Ecológica es una de las novedades que la Diputación de Cádiz ha puesto en marcha este año. El objetivo de esta iniciativa es aglutinar en un solo plan todos los programas provinciales de cooperación con los municipios y entidades locales autónomas en materia de medioambiente y con ello, atender a las necesidades de los gobiernos locales, agilizar las gestiones, contribuir a la transición ecológica y promover la economía verde y azul en la provincia.
La presidenta, Almudena Martínez, y el vicepresidente segundo y responsable del Área de Transición Ecológica y Desarrollo a la Ciudadanía, Javier Vidal, han presentado los detalles de este plan que ya fue aprobado en el Pleno de marzo y que se encuentra inmerso en la fase de recepción de solicitudes por parte de los ayuntamientos destinatarios.
En palabras de Martínez del Junco, este Plan responde al “doble compromiso” del Gobierno de la Diputación “con la sostenibilidad ambiental, económica y social” por un lado, y con los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes y entidades locales autónomas de la provincia, los cuales “tendrían difícil transitar hacia la sostenibilidad y poder afrontar problemas y desafíos ligados al medioambiente y al clima”, por otro.
La presidenta ha resaltado que esta iniciativa ofrece a los municipios destinatarios “más agilidad para que los ayuntamientos dispongan pronto de las ayudas, más presupuesto para una provincia más sostenible, más planes y más asistencia a los municipios pequeños”.
La sostenibilidad es para Martínez del Junco “una pieza clave” de la gestión política provincial y un elemento “transversal” de las áreas y del presupuesto de 2025. “Somos el Gobierno de la sostenibilidad. Gestionamos para hacer de Cádiz una provincia más sostenible, más próspera económicamente y más habitable para los gaditanos”, ha dicho la presidenta.
Vidal por su parte, ha desgranado los detalles de este Plan Integral de Transición Ecológica que se compone a su vez de seis líneas de actuación que se indican a continuación:
Línea 1: Cooperación para paliar los efectos del alga invasora a la que se destinan unos 500.000 euros. Sobre esta línea de ayudas, el diputado ha hecho hincapié en que la Diputación provincial es la única administración que está ayudando a los ayuntamientos ante este “grave problema”.
Línea 2: Cooperación para la vigilancia y control del Virus del Nilo Occidental, con una partida de unos 550.000 euros (esta partida ha tenido que incrementarse 250.000 euros tras aumentarse el mapa de municipios en riesgo).
Línea 3: Cooperación para promover estudios, trazados, mantenimiento y difusión de los senderos municipales, con un presupuesto de cerca de 200.000 euros. Es una de las novedades. La idea es poner en valor estos senderos y aprovechar su “potencial para el desarrollo turístico”.
Línea 4: Cooperación en materia de medioambiente: servicios municipales de prevención ambiental, cambio climático, economía circular, sanidad ambiental y bienestar animal, dotada de 550.000 euros.
Línea 5. Plan Proindes. Para la instalación de sistemas fotovoltaicos, adquisición de vehículos eléctricos y estaciones de recarga de vehículos eléctricos, con un presupuesto de 1,4 millones de euros.
Línea 6: Plan Aire. Para la revitalización de espacios públicos. Este año el presupuesto está destinado a la asistencia en la redacción de los proyectos con los que los municipios solicitantes pretenden recuperar espacios para la ciudadanía, en detrimento de los destinados a los vehículos a motor. El presupuesto es de unos 400.000 euros.