La sección sindical de CSIF en Elicodesa, S.A.U. ha desmentido las afirmaciones realizadas por la alcaldesa Carmen Álvarez en relación con los temas abordados en el consejo de administración celebrado este miércoles. A través de un comunicado, el sindicato ha negado que la empresa dejara de abonar la antigüedad desde 2018, tal como señaló la regidora municipal.
“Dicho concepto se ha estado respetando escrupulosamente conforme al acuerdo suscrito con el comité con anterioridad”, ha reiterado CSIF, desmintiendo así las declaraciones realizadas por Álvarez en días previos.
Desde el sindicato también han criticado que la alcaldesa, en sus explicaciones sobre la destitución del anterior apoderado de la empresa pública, haya recurrido a atacar a los grupos de la oposición. En palabras del comunicado, “únicamente se ha actuado dentro de los cauces que la democracia permite”.
Respecto a la asamblea convocada por la alcaldesa con trabajadoras de Elicodesa, CSIF ha asegurado que no se rechazaron los acuerdos del consejo, sino que algunas empleadas expresaron haberse sentido coaccionadas para firmar ciertos documentos. El sindicato recuerda que estas trabajadoras llegaron a concentrarse a las puertas del Ayuntamiento en días posteriores.
CSIF también ha señalado directamente a la delegada sindical de Comisiones Obreras, a quien acusa de haber “instrumentalizado políticamente” el conflicto. En ese sentido, le instan a aclarar con quién se habría reunido para lograr sus objetivos.
El comunicado lamenta el trato que, a su juicio, está recibiendo un trabajador encargado desde hace años, al que, según denuncian, se estaría sometiendo a un “linchamiento” por parte de la alcaldesa. “Sus propias declaraciones evidencian la animadversión que mantiene hacia este trabajador, probablemente por no haberse sometido a su voluntad”, recoge el texto.
Finalmente, la sección sindical de CSIF ha querido agradecer a PP y PSOE el apoyo mostrado a la plantilla en este conflicto, destacando su respaldo desde el inicio del proceso.
El conflicto en Elicodesa, la empresa municipal de limpieza y mantenimiento, ha cobrado protagonismo en las últimas semanas, con tensiones entre el gobierno local, sindicatos y oposición en torno a la gestión interna de la entidad.
