El Ayuntamiento de Sanlúcar de Barrameda ha publicado este viernes la convocatoria y las bases para seleccionar, mediante concurso de méritos, cinco plazas de funcionarios interinos que integrarán la nueva oficina de inserción sociolaboral en el Centro de Servicios Sociales Comunitarios del Barrio Alto.
Según ha informado el consistorio, las plazas convocadas corresponden a dos técnicos de integración social —uno de ellos a media jornada—, un psicólogo/a, un trabajador/a social y un educador/a. Las solicitudes pueden remitirse desde hoy y durante diez días hábiles a partir de la publicación del anuncio en la web municipal, donde también pueden consultarse la convocatoria y las bases del proceso.
El Ayuntamiento ha señalado que este refuerzo de personal será posible gracias a una financiación de 590.000 euros procedente del acuerdo firmado en junio entre la alcaldesa Carmen Álvarez y el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, dentro del Acuerdo de Doñana. Según recoge la nota municipal, este programa no tendrá coste para las arcas locales.
La nueva oficina contará con un equipo que trabajará a pie de calle y que atenderá a colectivos vulnerables o en riesgo de exclusión, entre ellos familias, menores, jóvenes, víctimas de violencia o discriminación y población migrante. El Ayuntamiento estima que más del 80 % de las personas actualmente atendidas por los servicios sociales municipales podrían beneficiarse de estas actuaciones, además de quienes sean derivados desde otros recursos.
El procedimiento se desarrollará conforme a los principios de igualdad, mérito, capacidad, publicidad y celeridad, y los nombramientos serán interinos por programa, limitados a la duración del proyecto.
La alcaldesa Carmen Álvarez ha valorado la convocatoria afirmando que “seguimos dignificando los servicios sociales” y que con esta iniciativa se avanza “en el objetivo del Gobierno local de mejorar las condiciones de vida y la inclusión sociolaboral de la población más vulnerable de Sanlúcar”.
La creación de este equipo se enmarca en un contexto en el que Sanlúcar mantiene índices históricos de desigualdad y vulnerabilidad, pese a la reducción del paro registrada en los últimos años, un escenario que marcará el campo de actuación de los nuevos perfiles profesionales.
