El Grupo Municipal VOX en el Ayuntamiento de Sanlúcar ha manifestado su rotundo rechazo al anuncio del equipo de gobierno que encabeza Carmen Álvarez (IU), tras conocerse la intención de destinar cerca de 420.000 euros a la implantación de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en la ciudad.
La portavoz de la formación, Carmen Infantes, ha calificado la medida como “una imposición ideológica y clasista”, al considerar que “penaliza a los sanluqueños que cada día utilizan su vehículo para trabajar, llevar a sus hijos al colegio o realizar sus tareas cotidianas”.
Infantes ha recordado que VOX votó en contra de la puesta en marcha de esta iniciativa, a la que tacha de “sin sentido” y de responder a las “políticas progres y a la Agenda 2030”, que —según afirma— “no tienen en cuenta la realidad social y económica de miles de familias trabajadoras de Sanlúcar”.
Asimismo, la portavoz ha denunciado que el Ayuntamiento pretenda invertir 420.000 euros en un proyecto que, a su juicio, “no da respuesta a los verdaderos problemas de la ciudad, como la falta de limpieza, el abandono de los barrios o la inseguridad en las calles”.
Infantes ha asegurado que, en los últimos días, VOX ha recibido numerosos mensajes de vecinos que expresan su malestar con esta iniciativa, “hartos de que el Ayuntamiento gaste casi medio millón de euros en una medida impuesta que solo busca recaudar”.
Finalmente, la portavoz ha señalado que “los sanluqueños merecen conocer la verdad sobre la Zona de Bajas Emisiones”, insistiendo en que “no es una medida ecológica, sino una forma encubierta de restringir la libertad de los ciudadanos y aumentar la presión económica sobre quienes menos tienen”.