La Consejería de Salud y Consumo continúa desplegando en Andalucía los proyectos locales ante la fiebre del Nilo occidental (FNO), puestos en marcha el pasado mes de mayo. Estas actuaciones tienen como objetivo dotar a la población de conocimientos y herramientas prácticas para prevenir la transmisión de esta enfermedad.
Desde su inicio, se han llevado a cabo más de 1.300 actividades en todo el territorio andaluz, distribuidas en cuatro grandes líneas de actuación: centros escolares, acciones comunitarias, colaboración con profesionales no sanitarios y colaboración con profesionales sanitarios.
De estas actividades, casi 500 se han desarrollado en centros escolares, lo que evidencia la importancia de implicar a la comunidad educativa en la prevención. Coincidiendo con el inicio de curso, se retoman las charlas y talleres dirigidos al alumnado, en los que se abordan aspectos claves como la autoprotección frente a las picaduras y la eliminación de criaderos de mosquitos en el entorno doméstico y comunitario.
Cada sesión educativa incluye una evaluación posterior que recoge el grado de satisfacción de los participantes y posibles áreas de mejora. La mayoría de las valoraciones obtenidas reflejan un grado de satisfacción alto o muy alto, lo que avala la utilidad y acogida de este tipo de iniciativas.
Sensibilización, prevención y futuro
El objetivo de mantener estas acciones formativas es no bajar la guardia frente a la enfermedad, incluso en los periodos de menor riesgo. La sensibilización y capacitación de la población no solo permite actuar en el presente, sino que constituye una inversión en futuras campañas, porque una ciudadanía informada y formada es clave para prevenir contagios y proteger la salud individual y colectiva.
En este sentido, la Consejería de Salud y Consumo recuerda que la autoprotección es esencial, pero también lo es evitar criaderos de larvas en los hogares y alrededores como medida básica para reducir la presencia del mosquito vector. En septiembre y octubre se dejan de utilizar la gran mayoría de piscinas de uso privado, por lo que es especialmente importante que no se conviertan en un criadero de mosquitos. Para ello, se puede optar por su vaciado completo de agua, continuar con su mantenimiento o realizar tratamientos hasta la siguiente temporada.
Con este conjunto de actuaciones, Andalucía refuerza su compromiso con la prevención de la fiebre del Nilo occidental, consolidando la labor de los Equipos de Proyectos Locales de FNO como un recurso esencial para acercar la salud pública a la población. Además, se ha incorporado nuevo material sobre prevención y protección para la ciudadanía en el apartado web de virus del Nilo elaborado por el Distrito Sanitario Córdoba y Guadalquivir.